Friday, February 10, 2017

Porque leer la verdad de Maritza Neila Wills. JR

Porqué leer y buscar la verdad. Es mi pregunta ante una sociedad en involución total. El planeta evoluciona en su ciclo normal y la humanidad involucióna sin dignidad. Valores y principios desvirtuados que dan un ejemplo erróneo y apologico a las nuevas generaciones que absorben sin educación mitos y leyendas de genocidas y pedófilos bajo el manto hoy de la santidad. 

Porqué leer la verdad me volveré a preguntar cuando los medios y programadoras orgasman con el delito.

Porqué leer la verdad de Maritza Neila Wills? , es hoy , no ayer una persona causa efecto de su ayer. 

JR 

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Libro sobre la vida de Popeye no se distribuirá más

Por: Columnista Invitado febrero 8, 2017

Texto exclusivo de laescritora Maritza Neila Wills para KienyKe.com.

Ciertamente, de cada emisión noticiosa no se escapa el asesino, el extorsionista, el atracador, el ladrón, los grupos criminales, los sicarios, el violador, el corrupto y otros tantos criminales. Tampoco se escapa  “la victima” , que al parecer solo forma parte de las altas cifras olvidadas.

La violencia y la intolerancia tienden a ser incrementadas para hacer crecer esos cuadros estadísticos que nos dicen que en determinado mes u año los muertos disminuyeron ó aumentaron. ¡Las cifras son aterradoras! Llama poderosamente la atención aquellos cometidos por y contra menores de edad.  Increíblemente estos indicadores terminan siendo el  gran “paliativo para las victimas”.

Como la sangre exhibida en los noticieros no es suficiente se hace imperativo para la industria audiovisual vender el crimen como la gran “obra dramaturga de arte” al que ustedes luego le llamarán “entretenimiento” ó “ficción” , pero que traducido al argot popular se llamará “Narco-novela” , y así completar el gran coctel de sangre asegurado en aquellos televidentes que con un servicio básico de televisión no tendrán otra opción.

Lea también: “Popeye me quiere matar”, testimonio de la escritora que quiere desenmascarar al exsicario de Pablo Escobar.

Los medios de comunicación son ampliamente conocedores de la problemática social, así mismo del origen del crimen como forma de vida en Colombia,  sus nefastas consecuencias, las grandes cifras de una economía subterránea que el sicariato maneja, y que a hoy también es producto de exportación,  su responsabilidad y compromiso social y con la vida misma. Pero que es la vida? Señores, la vida es el “primer valor humano”  en relación con nuestros semejantes, con la familia, con la escuela, con la comunidad, con la naturaleza, siendo consientes de que una vez se pierda ella es “irreparable”.  No podemos olvidar que bajo los parámetros antes enunciados, todos somos y seremos victimas potenciales  si no nos detenemos a revisar hasta que grado de indiferencia y complicidad con la muerte hemos llegado.

Lo más desolador es la indiferencia ciudadana que se ha ido acostumbrando a vivir en medio de la criminalidad y donde ya nada nos aterra por escabroso que sea el nuevo crimen. Que diablos importa si a este ciudadano lo asesinaron en medio de la tortura con latas de sardinas llenas de puntillas hasta llegar de desollarlo para que cante, que importa si lo descuartizaron con sierra o machete, que importa si lo explotaron en una calle donde solo era un peatón más, que importa si lo mataron a bala.  Gran representante de esta cruel tragedia humana es el Sr. Jhon Jairo Velásquez Vásquez alias Popeye o a hoy el en las calles el Ángel de la muerte y para ustedes JJ y su gran tv serie.

Aún así en nuestra constitución  reza  que el derecho a la vida es inviolable y que ningún tercero tiene derecho a arrebátanosla, también en ella reza que el estado esta obligado a protegernos. Tristemente su cumplimiento es banal por no decir nulo. ¡La vida en Colombia no vale nada! Mientras tanto los cementerios no dan abasto y las victimas seguirán llorando sus muertos. Como olvidar el humor negro del señor Velásquez en su primer y real visita al cementerio Monte sacro el 2 de diciembre de 2.014: Mogollita, aquí esta su clientela porque la mía la sacaron hace años. Algunos rompieron en risa.  

Nada de esto cambiará si todos como sociedad no reflexionamos sobre el verdadero “valor de la vida”.

Señores, la vida no es ficción, ni aquel actor de alguna histórica tragicomedia “shakesperiana” del siglo XVI. Vivamos la realidad del siglo XXI en una Colombia llena de esperanza de modo que ya no tengamos que escribir más páginas con tintas de sangre, como las que escribí en conjunción con uno de los asesinos confesos mas crueles y despiadados que ha parido Colombia.

Siendo coherente con los principios que fui educada, con los lineamientos a los que estoy sujeta como parte de una sociedad, y  a la que  quise contribuir donando cualquier utilidad producto del libro “Mi vida como sicario de Pablo Escobar”,  para ser invertida en una de las poblaciones más vulnerables ante el crimen: hijos e hijas de prisioneros y prisioneras de Colombia a través de la fundación Pa´lante un mundo nuevo. De esta determinación tenia conocimiento el Sr. Velásquez. A este objetivo social también  increíblemente después de invertir 23 años y 3 meses en prisión, siendo conocedor de la problemática carcelaria, fracasó. A pesar de ellos él arguye a boca llena que no se le permite participar en programas tales como delinquir no vale la pena. ¡Que ironía!

Libro sobre la vida de Popeye no se distribuirá más

En honor y como un acto de solidaridad con  todas las victimas de mi país, representadas por la Fundación Colombia con Memoria,  en honor y solidaridad con todas las victimas del sicariato en México, Suramérica y España,  tanto mi editorial Harper Collins como yo,Maritza Neila Wills hemos acordado no distribuir más y por termino indefinido el libro en mención. No podemos ser indiferentes a tanto dolor causado por la maldición de Escobar y sus secuaces. En honor a la vida no podemos poner en riesgo ningún ser humano, por muy “lucrativo” que el negocio parezca. Nos resulta inadmisible que como creyentes en Dios se siga sosteniendo en una mano un arma y en la otra el crucifijo.

En honor a nuestros muertos, en honor a un país que hoy pretende crecer cono una nación en paz, de la manera más respetuosa y solidaria, invito a los canales televisivos RCN y CARACOL a  tejer redes de cooperación sólidas, basadas en virtudes como la Empatía, la Solidaridad y el Respeto.

Los invito a construir país diciendo: NO MÁS VIOLENCIA EN NUESTRAS PANTALLAS. NO MÁS SEMILLEROS DE NARCOS. NO MÁS SEMILLEROS DE SICARIOS. NO MÁS NARCONOVELAS.

El tiempo y la vida son irrecuperables.

El amor y el odio son enemigos

La riqueza y la pobreza no se acercan

La vida y la muerte son imborrables.

¡Como no amar la vida si lo es todo!

MARITZA NEILA WILLS

 

 

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JR